Cuando la miro, tan lejos de mi descanso
cuando no la puedo tocar ni con las palabras
entonces la abrazo con todas mis nostalgias
como la carne al hueso
la amo cuando mi inunda,
cuando sus ojos duermen en mi mente
la amo con la fuerza de un rencor
la amo con el tono rojo de pasión
y con la estabilidad de la locura
la amo como si fuera ella
como si su pulmón exhalara en mi cuerpo
como si su aliento alimentara oxigeno por mis venas
la amo por que es fértil su amor
robusto, solido, con años de gestación
la amo por que es mi amor
y juntos dejamos de ser dos